Seré
espuma blanca que flote en el agua
ilusoria,
inocua, casi imaginaria
efervescencia
que mana de mar salada
del
arrullo de las olas cuando chocan con tu alma.
Suave
como tu almohada que acaricia tu pelo cuando descansas.
Fresca,
salvaje, burbujeante
si te
acercas a mi y emprendemos viaje
hacia
mundos perdidos y universos distantes.
Y me
transformo en pompa que nos envuelve
microcosmo
vibrante de placidez en tu semblante
al
escuchar los ritmos entrelazados que ambos sentimos
armonía
y calidez en este espacio
refugio
de ilusión que compartimos.
Espuma
blanca, salvaje, fresca, suave ...