martes, 21 de agosto de 2012

Tormenta



Hace tiempo que no verso a fuego
solo salen bonitos deseos,
la calma que adormece
que no corta el viento,
la sangre que no brota
la nada que aparece.
Preludio de tormenta
que en mi ser se desata,
que mi temperamento
no se presta al nirvana
y aparecen las uñas de la gata
que rasgan el velero
que navegaba en olas con resaca
y empieza el hervidero
la pasión se derrama
el huracán comienza
la mar encabritada.
Naufraga en el amor
que a la deriva vara
buscando islote y sueños
rotos en río de lava.